Hormaechea, que llegó a la sede de la Diputación Regional pasadas las 11,30 horas de la mañana, subió inmediatamente a su despacho sin responder a las preguntas de los periodistas que le aguardaban.

Los numerosos informadores que esperaban al primer mandatario regional sufrieron la contundente actuación del servicio de seguridad de la dputación, que en todo momento evitó que los profesionales de los distintos medios se acercaran a Hormaechea.

El presidente cántabro presidió esta mañana el Consejo de Gobierno, sin que por el momento se conozca si en el encuentro se habló sobre las reuniones mantenidas en Madrid o sobre la postura que adoptarán él y los seis miembros de su gabinete que están procesados.

El mutismo sobre el futuro de Hormaechea es la tónica dominante tanto en la Diputación Regional como en el seno del Partido Popuar en Cantabria.

El presidente del PP cántabro, José Luis Vallines, quien ha asistido junto a Hormaechea a las reuniones que éste ha mantenido con la cúpula del partido a nivel nacional, manifestó que él ya ha hecho las reflexiones oportunas, pero no quiso confirmar ni desmentir si es partidario o no de la dimisión del presidente de Cantabria.

Por su parte, el vicepresidente del PP en Cantabria y alcalde de Santander, Manuel Huerta, fue más cauto que el presidente del partido, remitiendo a los inormadores al acuerdo que adopten en su día el Comité Ejecutivo regional del PP.

Las próximas actuaciones de Juan Hormaechea son aún una incógnita, tanto para los informadores como para sus colaboradores más cercanos.

El presidente cántabro está invitado mañana en Madrid a la inauguración de la nueva sede de la Casa de Cantabria en la capital de España, pero, según fuentes consultadas por Servimedia, el viaje del líder regional todavía no ha sido confirmado.