El doble crimen comenzó a fraguarse esta pasada madrugada, cuando el asesino con domicilio en la localidad de Torremolinos, trasladó a su mujer a un descampado situado entre el Palacio de Congresos de la localidad y un conocido Parque Acuático, donde acabó con su vida de un único disparo en la cabeza, efectuado con una escopeta de caza de su propiedad, con munición del calibre 12.

Con posterioridad, Antonio Gómez Muñoz se trasladó hasta la calle Gerona de Málaga, donde vivía su cuñado, Antonio García Laguna. Al parecer, el agresor estuvo aguardando en el interior de su vehícuo a la salida de su cuñado, hecho que se produjo al filo de las ocho de la mañana, momento en el que descargó cinco disparos contra su víctima, cuando éste abandonaba en su vehículo el interior de su garaje.

Los cinco disparos causaron la muerte instántanea de la víctima, mientras que el agresor emprendía la huída, ante la mirada atónita de numerosas personas que transitaban por la zona, situada junto a la Jefatura de Tráfico y el Edificio de Usos Múltiples, sede de las delegaciones de la Junta de Andlucía en la capital.

Según el relato de los hechos aportados por los testigos, el agresor aguardó a que su cuñado saliera del garaje en su vehículo, acercándose a la ventanilla del conductor para efectuar un primer disparo.

El conductor perdió el control del vehículo, empotrándose contra un contenedor de basuras, que frenó la trayectoria. En ese momento, el agresor se dirigió hacia la víctima y efectó cuatro disparos más.

El agresor, según la versión vecinal, vestía con un mono de trabajo decolor azul y cubría la cabeza con una gorra de beisbol, cuya visera tapaba buena parte del rostro.

Una hora después del segundo crimen, la Policía de Torremolinos recibía una llamada de un vecino de la localidad en la que avisaba de la aparición de un cadáver en el descampado situado entre el Palacio de Congresos y el mencionado Parque Acuático.

Minutos después, los funcionarios policiales comprobaron la existencia del cadáver y concluyeron que se trataba de María del Carmen Zaragoza Ramírez, espsa del agresor. La mujer presentaba un único disparo en la cabeza, al parecer también efectuado con la misma arma.

Al filo de las diez de la mañana, Antonio Gómez Muñoz se entregaba en la comisaría de Policía de Antequera, localidad situada a cuarenta y cinco kilómetros de Málaga, confesando el doble asesinato.

Un portavoz de la comisaría de Policía de Málaga ha asegurado que el móvil del doble crimen podría ser sentimental, motivado por los celos que el agresor tenía de su cuñado y esposa, de quen advertía relaciones íntimas. El Grupo de Homicidios de la Policía de Málaga se ha hecho cargo de la investigación del suceso.