Con esta inversión se pretende acometer una ampliación y modernización de las instalaciones existentes, permitiendo un incremento de la capacidad de tratamieno de los efluentes líquidos producidos en los diferentes procesos de la central, así como una mejora en el grado de depuración de los mismos.

Asimismo, la eléctrica asturiana tratará de conseguir "mejoras significativas en la calidad de las aguas vertidas por la central a la ría de Aboño, así como una reducción del volumen de la misma, gracias al reciclado parcial de las aguas tratadas que, además, permitirá un menor consumo de agua dulce en la central".

La obras que ahora se acometen han sido adudicadas a la UTE formada por las empresas Felguera Fluidos y Duro Felguera Plantas Industriales. El plazo de ejecución de las mismas es de doce meses.