El accidente se produjo a las 06.20 de la mañana al descarrilar cinco vagones -tres de literas y dos de coches camas- y un remolque cargado de coches del expreso Madrid-Algeciras a raíz de un corrimiento de tierras provocado por la lluvia.

Uno de los heridos, Manuel Rodríguez Losada, empleado de RENFE, permanece en estado grave, al haber sufrido traumatismo craneoencefálico. Según fuentes del centro hospitalario de Cabra, donde fue internado, evoluciona favorablmente. Los dos heridos leves eran pasajeros del tren.

El resto de pasajeros continuaron viaje por autobús a su destino, aunque previamente fueron evacuados en coches todo terreno dado que el lugar del accidente es una zona aislada a tres kilómetros de la carretera más próxima. Fuentes de Renfe han asegurado que la moderada velocidad del Expreso, en el que viajaban 161 personas, ha evitado una tragedia de mayores consecuencias ya que el resto de los vagones no volcaron.