El herido fue alcanzado por un objeto contundente, al finalizar la concentración, en la cabeza y fue trasladado hasta un centro sanitario de San Sebastián por miembros de la DYA.

La concentración de los empleados de José María Aldaya, que cumple hoy 129 días en manos de ETA, transcurrió en medio de una gran tensión debido a losconstantes gritos en favor de ETA y en contra de los portadores del lazo azul que proferían los simpatizantes de HB.

Los trabajadores de Alditrans estuvieron acompañados por varios cientos de personas, entre las que se encontraban Consuelo Ordóñez, hermana de Gregorio Ordoñez; el parlamentario vasco de Izquierda Unida (IU) Juanjo Domínguez y trabajadores de Ikusi.

Los empleados de Aldaya portaban la habitual pancarta con el texto "Todos somos José Mari" y permanecieron en silencio durante los quice minutos que duró la concentración, que finalizó con un prolongado aplauso que intentaba ser sofocado por gritos en favor de ETA por parte de los seguidores de HB.

En la concentración de la izquierda 'abertzale' que pide la libertad para Euskalerria se encontraban los miembros de HB Itziar Aizpurúa, José María Olarra, Rufi Etxeberría, Joseba Alvarez y Roberto Sampedro, entre otros.

Los contramanifestantes al lazo azul portaban pancartas de dirigidas la juventud vasca, en una de las cuales se lea: "Si no tenéis cuidado con los medios de comunicación os harán amar al opresor y odiar al oprimido".

Al finalizar el acto dos encapuchados colocaron una bandera española junto a la Paloma de la Paz y la prendieron fuego, acción que fue jaleada por los simpatizantes 'abertzales' con gritos a favor de ETA.

Asimismo, jóvenes radicales protagonizaron intentos de agresión a personas que participaron en la concentración en favor de la liberación de Aldaya y lanzaron piedras, bolas de plomo de grandesdimensiones y otros objetos contundentes contra las personas que recriminaban su actitud en las cercanías.