Tras recordar que las deliberaciones de cualquier tribunal "son siempre secretas" y sus magistrados están obligados a cumplir con este deber, Comas añadió que esta filtración no hace sino "deteriorar el normal funcionamiento de una institución como el Tribunal Constitucional".

Asimismo, recordó que "no es la primera vez" que el fallo de un tribunal filtra antes de que lo conozcan las partes interesadas. En este sentido, rememoró el ía en que la prensa adelantó el fallo del "caso Rumasa", dictado por el Tribunal Constitucional, o del "caso Marey", en el Supremo.

"En el "caso Rumasa" se dió mucha importancia y se investigó, hasta el punto que varios magistrados tuvieron que declarar ante el Tribunal Supremo", recordó Comas, quien advirtió que la filtración ha podido proceder también de "cualquier funcionario, no necesariamente de uno de los jueces".

Comas señaló que la filtración de una deliberación por parte de cualquier funionario público puede constituir un delito de rebelación de secretos penado por la ley.