La joven, cuya identidad todavía se desconoce, se encontraba desnuda, semienterrada y no tenía heridas o signos de violencia, aparte de un golpe en la mandíbula.

El cadáver, que llevaba enterrado aproximadamente una semana, según las primeras estimaciones de la Guardia Civil, fue desubierto casualmente por un tractorista que trabajaba en la finca del diputado y correponde a una mujer joven, de aproximadamente un metro cincuenta de estatura, delgada y con media melena morena.

Tras el levantamiento del cadáver por parte de titular del juzgado de instrucción número 2 se procedió a su traslado al Instituto Anatómico Forense de Valladolid para practicarle la autopsia.

Actualmente no se conocía en la provincia vallisoletana la desaparición de ninguna joven, por lo que el hallazgo ha conmovido y sorprendido a esta provincia.