Eva Lavandeira, una niña autista, se perdió cuando estaba con su padre en Montefaro, a unos dos kilómetros de su domicilio en el municipio coruñés de Vimianzo. El suceso ocurrió después de que el padre de la niña la dejara unos momentos sola en su automóvil, para vigilar unos caballos que se crían sueltos en la zona.

El gobernador civil de La Coruña, Carlos Vacas Belda, manifestó esta tarde a Radio acional que la niña fue hallada a las 18,15 horas por un vecino que participaba en los retenes de voluntarios y guardias civiles que todavía patrullaban por el monte.

Vacas señaló que el cadáver estaba a unos dos kilómetros del lugar en que la pequeña se perdió, pero este dato fue corregido por el alcalde de Vimianzo, Alejandro Rodíguez, que en declaraciones realizadas en el lugar de los hechos precisó que la distancia entre ambos puntos era de entre cuatro y cinco kilómetros.

El edil, que pudo cntemplar en vivo el cuerpo de la niña dentro de la zona acordonada por la Guardia Civil mientras el juez procedía al levantamiento del cadáver, señaló que éste se encontraba en un descampado, boca abajo, cerca de un pequeño río. La niña no presentaba signos aparentes de violencia y tenía puesto el chandal que vestía en el momento en que perdió contacto con su padre.

ANGUSTIOSA BUSQUEDA

Desde el pasado domingo, en la búsqueda de la niña participaron la práctica totalidad de los vecinos de Vimianzo, aentes de la Guardia Civil y cien cazadores pertenecientes a la Sociedad de Caza San Vicente, entre otros efectivos, pero todos sus esfuerzos fueron inútiles.

Las tareas de búsqueda resultaron particularmente angustiosas debido a que la zona en que se perdió la niña es un área de paso de lobos, por lo que cabía la posibilidad de que fuera devorados por ellos.

A eso se sumaba el temor a que hubiera caido en alguno de los pozos mineros abandonados que también existen en la zona, pertenecientes a antguas explotaciones de wolframio.

El fracaso de las operaciones de búsqueda llevó el pasado jueves a limitar esas tareas a retenes de la Guardia Civil y Protección Civil, mientras se abrían otras líneas de investigación, sin descartar la posibilidad de un secuestro u otra eventualidad.

El gobernador civil indicó esta tarde que, tras el hallazgo del cadáver, la investigación se orientará en la dirección que estime el juez, al tiempo que expresó su pésame a la familia.