Hace cuatro años la proporción era uno de cada veinte -----------------------------------------------------

MADRID
SERVIMEDIA

El 22 por ciento de las mujeres que contrajeron el SIDA en 1990 lo hicieron por vía heterosexual, cuando sólo 2 años antes esta vía de infección representaba únicamente el 6 por cieto, según cifras del Plan Nacional del SIDA (PNS).

Cuando todavía no se ha generalizado el uso del preservativo, ni entre las parejas normales ni entre los clientes de las trabajadoras del sexo, los estudios que, desde 1989, se realizan cada 6 meses entre prostitutas de toda España están sirviendo para calcular la evolución de la transmisión heterosexual del SIDA entre la población en general.

Fuentes del PNS calculan que unas 10.000 heroinómanas se prostituyen habitualmente en España para poder omprar su dosis. En este colectivo, las tasas de infección oscilan entre el 30 y el 50 por ciento.

En cuanto a las prostitutas no drogadictas, de haber un 2 por ciento de portadoras del virus de inmunodeficiencia humana (VIH) hace 5 años se ha pasado al 4 por ciento, según los últimos resultados de los estudios que se realizan cada 6 meses en toda España desde 1989.

El largo período de incubación del virus (en el 50 por ciento de los casos superior a 10 años) y la dificultad en conocer el momentode la infección son factores que han impedido avanzar más sobre los riesgos de contagio, tanto por vía parenteral o sanguínea como a través de relaciones heterosexuales.

Los científicos creen que el riesgo de contraer el SIDA por vía heterosexual depende de muchos factores, como la clase de VIH, ya que hay muchos tipos, así como de si el emisor o el receptor padecen alguna enfermedad de transmisión sexual.

EL FACTOR MAS IMPORTANTE

A diferencia de algunas regiones del planeta, como el Africa subahariana o el Caribe, donde predomina la transmisión heterosexual de la infección, en Europa y otras partes del mundo el uso de drogas por vía intravenosa sigue siendo el factor de contagio más importante.

"Sin embargo, el número de mujeres infectadas que no tienen este factor de riesgo (ser toxicómanas) parece ir en aumento y esto podría significar que la transmisión heterosexual se está haciendo cada vez más importante", señala Pilar Estébanez, investigadora del Instituto de Salud Carlos III de Madrd, en un trabajo sobre "VIH y prostitución".

Gerardo Clavero, secretario general del Plan Nacional del SIDA, explicó a Servimedia que el contagio por vía heterosexual de una mujer que no pertenece a ningún grupo de riesgo suele venir a través del compañero, esposo o pareja, que puede tratarse de un drogadicto o un bisexual, por ejemplo.

Según un estudio realizado entre casi 800 prostitutas españolas, el 79 por ciento declaró no usar nunca preservativos con sus compañeros sentimentales, maridos, ec., mientras que sólo el 8 por ciento afirmó que nunca los empleaban con los clientes.

"Entre las prostitutas VIH positivas que no tienen antecedentes de inyectarse drogas, se supone que la mayoría adquieren el virus a través de contactos sexuales con un compañero o cliente infectado", afirma Estébanez.

Sin embargo, esta especialista señala que los estudios "se ven dificultados por el hecho de que, con frecuencia, la mujer no sabe si la persona con la que tiene relaciones pertenece a uno de los gupos considerados de alto riesgo o es VIH positivo, sobre todo si se trata de un cliente".

MARCADOR DE LA POBLACION

Estébanez indica que "habrá que vigilar con especial atención la situación de las prostitutas no drogadictas frente al VIH, no sólo por ellas mismas, sino porque las tasas de infección en este colectivo pueden servir de marcador de lo que está pasando con la transmisión heterosexual en la población general".

Aunque con las debidas reservas, porque se trata de trabajos científicos ue no son directamente comparables entre sí y proceden de zonas del mundo muy alejadas unas de otras, pueden servir de advertencia los resultados que se están obteniendo en países africanos o asiáticos.

"La circulación del virus ha crecido en las prostitutas de Nairobi (Kenia), donde la seroprevalencia ha aumentado del 4 por ciento en 1981 al 61 por ciento en 1985", indica Estébanez.

Tailandia, un país asiático que parecía estar casi libre de la infección, según un estudio en 2.880 prostitutas relizado en 1985-86, pasó a un porcentaje bajo en 1988, pero, al año siguiente, se encontró una seroprevalencia del 36,5 por ciento de 238 mujeres que trabajaban en casas de prostitución en Chiangmai, segunda ciudad en población de Tailandia, según la investigadora del Instituto Carlos III.

En todo caso, la conclusión que apuntan tanto Pilar Estébanez como Gerardo Clavero es, aparte de la lucha contra el tráfico de drogas y los programas de desintoxicación de los drogadictos, el empleo del preservativo uando se desconozca si la pareja puede pertenecer o no a alguno de los diferentes grupos de riesgo o es portador del virus del SIDA.

(SERVIMEDIA)
24 Ene 1992
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