Gutiérrez manifestó que el Gobierno ha mostrado diferente comportamiento con empresas privadas que "han tenido auténticos fiascos y calamidades y, no obstante, obtienen ayudas estatales".

Según el dirigente de Comisiones, UGT ha solicitado unas intervenciones que "el Gobierno no tiene razones para no dárselas" y descartó que la actuación gubernamental on PSV tenga relación con la convocatoria de una huelga general para el próximo 27 de Enero.

Sobre las posibles actuaciones que podría haber realizado la central que dirige Nicolás Redondo, Gutiérrez indicó que "sería impertinente, insensato e irresponsable si me metiera en las tripas de UGT" y alabó el empeño de los dirigentes ugetistas por solucionar el problema.

Aunque evitó pronunciarse sobre la sucesión de Redondo al frente de UGT, Gutiérrez no cree que ésta afecte a la unidad de acción sindcal, que vienen alentando las dos centrales en los últimos años.

Sobre la posible unión orgánica aseguró que "no existe absolutamente nada", aunque recordó que "CCOO desde su origen tiene como objetivo una estrategia de conseguir la unidad sindical, y la sigue teniendo como perspectiva de futuro".