Laborda, que hace unos meses asistió como observador internacional al "macrojuicio" contra decenas de opositores en Malabo, declaró a Servimedia que la convocatoria electoral de ayer no era más que una "maniobra del régimen para asegurarse el poder".

Pero el dirigente socialista manifestó su esperanza, porque considera que "hay síntomas de cambio", como el plante de los cuatro candidtos en los comicios de ayer, incluidos los dos que era considerados "satélites" de Obiang, o el hecho de que Celestino Bacale, principal dirigente de la oposición en libertad, haya sido recibido recientemente en Estados Unidos por el Gobierno norteamericano y las grandes petroleras con intereses en el país centroafricano.

Laborda pidió al Gobierno español que facilite una "sensibilización en la opinión pública" respecto a la situación en Guinea. "Sería suficiente crear una conciencia sobre Guinea que ea el 10% de la que se tiene respecto a Cuba", estimó.

En cualquier caso, resaltó que la colaboración con el Ejecutivo en este asunto está siendo buena y que ahora lo que se debería hacer desde España es liderar una posición crítica de la Unión Europea respecto a la falta de libertades y respeto a los derechos humanos en el régimen de Obiang.