Guerra, que compartió mitin con el presidente andaluz, Manuel Chaves, ante un auditorio de unas dos mil personas congregadas en el arque Alonso Sánchez, expresó su extrañeza por la decisión de Arenas de querellarse contra él.

"No me explico cómo se va a querellar contra mí, seguro que si a mí me pone una querella, a él le pondrán una multa", indicó Guerra, para añadir que no ha sido él quien ha insultado a la derecha, sino que fueron los dirigentes del PP quienes se han mofado de su persona con palabras como "payaso", "ladrón" y "mono".

Guerra señaló que el propio Arenas le ha dado la razón y que ha reconocido que seguía figrando "por un problema de subsanación" en el Registro Oficial Mercantil como que dirigente oficial de una empresa sin haber dado cuenta de ello al Parlamento.

El vicesecretario general del PSOE, que estuvo en un tono más sosegado que en mitines anteriores, apuntó que el PP cuenta con muy pocas posibilidades para gobernar Andalucía, al tiempo que expresó su apoyo a Manuel Chaves, de quien dijo que "es quien viene demostrando que es el que puede mantener a Andalucía en el desarrollo iniciado en los últios años".

Por su parte, Manuel Chaves, que precedió en su intervención a Guerra, pidió el apoyo para su candidatura por entender que la región andaluza había salido del "subdesarrollo" en el que "otros" la sumieron, gracias a la gestión socialista.

El líder del PSOE andaluz señaló que tanto Huelva como la comunidad andaluza experimentaron una notable transformación durante los últimos años, y prometió que "el PSOE va a continuar llevándola hacia adelante".

El secretario provincial del PSOE d Huelva, Carlos Navarrete, fue quien lanzó las más duras críticas de la noche contra el PP e Izquierda Unida. Además, apostó por una pronta recuperación de la crisis económica, al tiempo que se mostró confiado en que la crisis de empresas como Puleva, Suzuki o Gillette no se extienda a otras áreas de Andalucía.