Para Garmendia debe producirse una decisión política que revoque la postura del patronato. Según la consejera de Cultura del Ejecutivo vasco es el Ministerio de Cultura el que tiene la últia palabra y el que debe pronunciarse por la responsabilidad que tiene con el citado Patronato.

La responsable de Cultura de Euskadi recordó que la petición de traslado fue cursada de forma unánime por la comisión de Cultura del Parlamento vasco, en la que también se encuentra representado el PP.

El alcalde de Guernica, el peneuvista Eduardo Vallejo, considera que la decisión del Patronato es más política que técnica y a su juicio, el Gobierno se escuda en un informe técnico para evitar el traslad de la obra de Picasso.

Vallejo considera que el Gobierno ha perdido una oportunidad de oro para satisfacer las que él considera justas demandas del pueblo vasco.

Iñigo Urcullo, portavoz del PNV en Vizcaya, cree que con las razones aducidas por el Patronato no hubiera podido repatriarse la obra desde los Estados Unidos y lamenta la falta de voluntad política para ceder el cuadro a la Fundación Guggenheim. Considera también que esta decisión es un grave error político y cultural.