La policía cree que el caso está prácticamente resuelto después de que ayer se encontraranlas armas del doble asesinato en el interior del vehículo de Pérez.

Los hechos ocurrieron en la madrugada del lunes al martes a cien metros del casco urbano de Siete Aguas (a 50 kilómetros de Valencia). Los dos guardias civiles, Manuel Sousa Casado y Florentino Sánchez Martín, realizaban una patrulla habitual cuando observaron un vehículo mal estacionado en un puente. Al acercarse el agente más joven al coche recibió un disparo que le mató en el acto. El sargento fue atacado después y también murió deimpacto de bala.

Posteriormente el presunto asesino se quitó la vida a sí mismo de un tiro en la sien en su domicilio de Cheste (Valencia). Gerardo Pérez dejó junto a su cuerpo una nota en la pedía perdón a su mujer y a las familias de los dos guardias civiles por lo que había hecho.

El pleno del Ayuntamiento de Siete Aguas (Valencia) decidirá hoy hacer hijos predilectos del pueblo a los dos guardias. El alcalde de la localidad dijo que el pueblo se ha volcado en los funerales de Manuel Sousa y d Florentino Sánchez, porque "eran unas personas muy queridas por todos".

Los cuerpos de los dos agentes han sido enterrados en sus poblaciones natales en Salamanca y Ciudad Real. El funeral por Gerardo Pérez está previsto para esta tarde en Cheste.