La Guardia Civil detectó dicha maleta, de color verde y de una conocida marca de moda italiana, tras comprobar que había sido abandonada en la cinta transportadora del aeropuerto tras la llegada del vuelo.

Según la aloración efectuada por los servicios antidroga de la Guardia Civil, el material, una vez adulterado, habría alcanzado un valor en el mercado de 200 millones de pesetas.

Hasta el momento no se han producido detenciones, aunque se investiga cual de los pasajeros que llegaron desde Madrid pudo haber transportado la maleta desde el país sudameriano y con posterioridad, quien la transportó a las islas.