El guardia ivil Flores recurrió a mediados del pasado mes de junio ante el Tribunal Supremo la sentencia de la Audiencia Provincial de Barcelona que le condenó a seis meses de prisión menor por apropiarse indebidamente del dinero de una sanción de tráfico por valor de 50.000 pesetas impuesta en 1996 a un ciudadano francés.

Desde entonces se ha especulado con que el agente Flores vaya a abandonar voluntariamente el instituto armado. Incluso su suegro, José Ortega Cano, reveló hace unos días que el guardia civil etá sumido en una depresión por lo que la condena podría suponer para su carrera profesional en el cuerpo de seguridad.

Ante el recurso que presentó Flores, la Dirección General de la Guardia Civil ha decidido no tomar desde entonces ninguna medida cautelar contra el marido de "Rociíto" hasta que el Tribunal Supremo no confirme la condena impuesta al agente.

Una vez que exista sentencia firme, la Dirección de la Guardia Civil procederá entonces a la apertura de un expediente gubernativo contra el gente Flores, en el que se señalarán las circunstancias en que se sucedieron los hechos, a partir de cuya calificación sí se le podría suspender de empleo y sueldo por el tiempo que estimen los juristas calificadores.