Los familiare del secuestrado, que regenta un negocio de restauración, detectaron su desaparición a mediodía de ayer y, dado que padece alguna dolencia cardiaca, pensaron en un primer momento que había podido sufrir algún percance.

Sin embargo, seis horas más tarde, cuando un hijo del desaparecido se encontraba solo en su domicilio, fue sorprendido por tres jóvenes que hablaban ruso y que le dijeron que su padre se encontraba bien, que les entregara los medicamentos que tomaba y que no comunicara nada a la Policía porque de los contrario "la cabeza se la separarían del tronco", según afirmaron.

A las once de la noche de ayer, los familiares del secuestrado decidieron denunciar el hecho en la Guardia Civil. Las investigaciones permitieron identificar en pocas horas un vehículo y el domicilio donde se alojaban los secuestradores. Tras establecer un dispositivo de seguridad, la intervención de los agentes de la Guardia Civil permitió la liberación del empresario ruso y la detención de sus seis secuestradores.

En el registro domiciliario se intervinieron joyas por valor de más de tres millones de pesetas, 1.500 dólares USA, 500.000 rublos, diversas armas blancas, narcóticos, y una microcámara con monitor para vigilancia y control de inmuebles.

La Guardia Civil informó hoy que el secuestro es puramente económico y que los secuestradores se proponían apropiarse de los negocios que el secuestrado posee tanto en nuestro país como en Rusia. Los detenidos se encuentran a disposición del Juzgado de Instrucción núero 4 de Orihuela (Alicante).