Ante la creciente alarma social por el aumento de la inseguridad ciudadana en las zonas habituales de recro, la Benemérita puso en marcha el pasado mes de abril una operación destinada al "mantenimiento general de la seguridad ciudadana".

La actividad de la Guardia Civil durante ese fin de semana se centró en el control de los clientes de discotecas, bares de carretara, alterne, etc. Cada cuartel se ocupó de controlar su ámbito territorial.

Según la Dirección General de la Guardia Civil, la delincuencia que se genera en estos lugares "es difícil de reducir, se halla siempre latente y resurge con ocasón de festividades, puentes laborales y períodos vacacionales, momento en que esos lugares registran un incremento notorio de visitantes".

La Guardia Civil considera que para mantener la seguridad en torno a estos lugares es necesasrio hacer "esfuerzos puntuales" para tratar de disminuir la posibilidad de que se produzcan delitos.

En el último fin de semana de abril la Benemérita cursó un total de 4.680 denuncias, de las cuales 1.146 se produjeron en Andalucía, 999 en Cataluña, 918 en la zona de evante y 440 en Madrid y alrededores. Las zonas de Baleares y Canarias fue donde se recogieron menos denuncias (90 y 88 respectivamente).

La Guardia Civil realizó 21.091 controles de alcoholemia, de los que 20.682 resultaron negativos y 409 positivos. La mayor proporción de pruebas positivas se produjo en Castilla y León, donde se registraron 97, seguida de Madrid (89), Andalucía (64), Cataluña (48), Galicia (46) y Levante (40). En total 163 personas de las sometidas a estos controles resultaron detendas.

Otras 308 personas más fueron detenidas por la Guardia Civil en relación con distintos delitos, fundamentalmente riñas y robos. En esta operación no se registraon aprehensiones de drogas.