Según informó hoy en una nota la Dirección General de la Guardia Civil, después del estallido acudió al lugar un equipo Tedax de la Comandancia de Madrid, que determinó que los escasos daños ocasionados en el puente se debieron a la explosión de un pequeño artefacto casero y que, en las primeras investigaciones, podría tratarse de una reivindicación laboral.

La Dirección General de la Guardia Civil, siguiendo los protocolos establecidos, no informó directamente a los reponsables del Ministerio del Interior, dada la escasa relevancia de los hechos.

Sin embargo, el diario vasco "Gara" recibió ayer sábado por la mañana una llamada telefónica, en la que un individuo comunicó que había sido colocada una bomba en un puente de madera del Valle de los Caídos, en Madrid, aunque no avisó de la hora de la explosión.

Por las características de la llamada, la Guardia Civil descartó "prácticamente desde un principio" una posible relación con ETA.

El Instituto Armado continúa investigando los hechos para localicar a los presuntos autores de la colocación del artefacto y trata de esclarecer la posible relación entre la explosión sucedida el viernes en el Valle de los Caídos con la llamada recibida en "Gara".