"Petra" fue localizada a las 8 de la mañana, cuando merodeaba en torno al recinto donde permanecen los antílopes del zoológico. El empresario Adolfo Sánchez Movellán, propietario de la leona y de los otros cuatro ejemplares que compartían jaula con ella, se acercó al animal y estuvo aariciándolo hasta que los especialistas acudieron con los tranquilizantes.

Sánchez Movellán crió a los cinco animales en un garaje hasta que el tamaño de los felinos hizo aconsejable su traslado a un recinto más seguro.

La fuga de la leona mantuvo alerta a los habitantes de los municipios próximos al zoológico y ha puesto en cuestión las medidas de seguridad de la instalación, en la que el año pasado ya se registró la fuga de una pareja de hipopótamos, que permaneció durante horas por las carreteas colindantes.

El propietario había asegurado a los vecinos de la zona que "Petra" no es peligrosa, por haberse criado en cautividad y estar muy acostumbrada a la presencia del hombre.

MALESTAR DEL GOBIERNO CANTABRO

Por su parte, el presidente del Gobierno cántabro, Jaime Blanco, que no ha ocultado su malestar por este nuevo episodio, ha encargado al veterinario jefe del zoo de Madrid, Antonio Luis García, un informe sobre la seguridad de Cabárceno, que servirá para revisar el sistema actual. García, que se desplazó ayer desde Madrid para hacerse cargo de las labores de captura, aseguró que ya estuvo revisando las medidas de seguridad del zoo cántabro en marzo del pasado año, aunque tuvo que interrumpir su trabajo.

Preguntado sobre si esa interrupción se debió a que el entonces presidente, Juan Hormaechea, y sus asesores no hicieron caso a sus indicaciones, García afirmó que "algo así".