La empresa Snacks de Castilla y León, que ha recibido la calificación de Centro Especial de Empleo por dar trabajo a personas discapacitadas, ha supuesto una inversión de 1.200 millones de pesetas y en ella trabajan en la actualidad medio centenar de personas

De ellas, el 80 por ciento son personas con minusvalía y, además, se trata de su primer empleo, para lo que han recibido un completo programa de formación, que actualmente se está impartiendo a otras 20 personas con vistas a una pronta incorporación.

Este proyecto empresarial y social, que surgió hace cuatro años, nace con la idea de proporcionar un puesto de trabajo digno a personas con minusvalías, motivo por el que el Grupo Siro se siente orgulloso de que esta iniciativa haya visto finalmentela luz.

Además, la fábrica, que se dedicará a la producción de patatas fritas bajo la marca comercial Dora, ha sido diseñada y construida teniendo en cuenta la incorporación de personal discapacitado, por lo que sus instalaciones y maquinarias están libres de barreras y son accesibles a personas con distintos tipos de minusvalías.

Snacks de Castilla y León tiene previsto alcanzar durante su primer año de funcionamiento una producción de 3,5 millones de kilos de patatas fritas, que comercializará ajo la denominación Dora, la marca de una de las seis compañías que conforman el Grupo Siro.

El Grupo Siro comenzó su andadura en el año 1991, cuando Juan Manuel González Serna y su esposa Lucia Urban adquieren a Danone la compañía Galletas Siro S.A. Posteriormente, se incorporaron al grupo la empresa Galletas Río, las compañías de pastas alimenticias La Familia y Ardilla, Productos Reglero y patatas fritas Dora. Actualmente, el Grupo Siro factura más de 20.000 millones de pesetas y da empleo a 700 pesonas.

En el acto de inauguración de la fábrica estuvieron presentes el presidente del Grupo Siro, Juan Manuel González Serna, y el presidente de la ONCE y su fundación, José María Arroyo, además de otros miembros del Gobierno regional y personalidades de la comunidad.