Griñán insistió en que no hay ningún agujero en las cuentas de la Seguridad Social atribuible a la gestión del Gobierno socialista durante los primeros meses del año e insistió en que "es una contradicción hablar de agujeros en los presupuestos de 1996 puesto que los socialistas sólo gobernamos los tres primeros meses del año y cuaquier desequilibrio será responsailidad del gobierno que ahora está gobernando".

El presupuesto de la Seguridad Social se cerró en 1995 con un déficit de 2.600 millones de pesetas y "la prórroga de esos presupuesto es consecuencia de la negativa del PP y CiU a aprobar un proyecto de Ley de Presupuestos para 1996", aseguró el ex ministro.

En su opinión, la falta de presupuesto para 1996 puede plantear problemas en el equilibrio financiero de la Seguridad Social "que tendrá que solucionar el Gobierno en función de gobierno y no coo oposición, echando la culpa a los demás".

El ex ministro socialista indicó a esta agencia que la Seguridad Social tendrá que asumir ciertos cambios para impedir que se produzcan déficits infinanciables en el futuro para lo cual ofreció al nuevo Gobierno el apoyo del Partido Socialista.

"El PSOE estará dispuesto a apoyar cualquier medida contenida en el Pacto de Toledo que sirva para consolidar el sistema de Seguridad Social", dijo el ex ministro.