Frente a estos datos, que Greenpeace tacha de "propagandísticos", la organización recuerda que en España el maíz transgénico apenas representa el 7% del total nacional.

Además, señala que el aumnto en España se debe fundamentalmente al Bt176, el tipo de maíz que el Gobierno español permite que se cultive desde 1998 y que está suponiendo un grave impacto para la agricultura y el medio ambiente.

En este sentido, Greenpeace insta al Gobierno a ofrecer datos oficiales sobre el cultivo de transgénicos en España. "Exigimos al Ministerio de Agricultura que ofrezca a los ciudadanos datos veraces sobre los transgénicos en España para contrastar las cifras ofrecidas por el ISAAA, un organismo privado inanciado por empresas como Monsanto, Syngenta o Aventis y que sirve de instrumento propagandístico a la industria de los transgénicos", subrayó Juan Felipe Carrasco, responsable de la campaña de ingeniería genética.

Las organizaciones ecologistas llevan tiempo solicitando información sobre las superficies y zonas en las que se está cultivando el maíz transgénico en España, una cuestión que no ha tenido respuesta por parte del Gobierno. "Dichos datos deberían ser públicos en virtud también de la Direciva Europea de acceso a la información ambiental", concluye Greenpeace.

Por último, recuerda que los consumidores siguen rechazando los transgénicos y que los agricultores siguen exigiendo su derecho a elegir.