GREENPEACE PIDE AL GOBIERNO QUE PARALIE LAS IMPORTACIONES DE MAIZ Y SOJA TRANSGENICA

- En el Día Mundial de la Alimentación recuerda que los transgénicos no son la solución al hambre

MADRID
SERVIMEDIA

La organización ecologista Greenpeace exigió hoy al Gobierno español que paralice las importaciones de maíz y de soja transgénica a nuestro país, que no tolere la siembra de cultivos transgénicos en España, cuando el resto de los países de la UE la prohíben, y que no apruebe nuevas variedades modificadas genéticamente. Greenpeace lanzó estas exigencias en la víspera del Día Mundial de la Alimentación bajo la premisa de que los cultivos transgénicos no son la solución al hambre en el mundo. "El hambre es una cuestión de justicia, de reparto, de acceso físico a los alimentos, de fertilidad de los suelos, de cultura y de derechos humanos", aseveró.

En opinión de esta ONG, es "una prueba de cinismo sin parangón" afirmar que la tecnología de los transgénicos ayudará a resolver un problema que es de índole político y eoestratégico.

La idea de que los transgénicos son la solución al hambre en el mundo se basa en dos supuestos: que los transgénicos producen más y que el hambre en una región del planeta está relacionada con la cantidad de alimento producido en esa zona. Para Greenpeace ambos son incorrectos.

"Es un hecho científicamente demostrado que los transgénicos no producen más que las cosechas no transgénicas", señaló Juan Felipe Carrasco, responsable de la Campaña de Transgénicos de Greenpeace. En relacin con el argumento de la relación entre hambre y producción de alimentos, aseguró que muchos de los países productores y exportadores de alimentos son al mismo tiempo aquellos con más hambre y pobreza.

"No sólo los transgénicos no producen más sino que el hambre en el mundo depende de la justicia y el reparto y no de la cantidad de alimento producido", remachó Carrasco.

Por otra parte, Greenpeace añade que los transgénicos dañan al medioambiente y reducen la biodiversidad y, por lo tanto, "ponen n peligro la capacidad de la naturaleza de ofrecer una alimentación sana y variada".

"Los transgénicos nos llevan a una agricultura homogénea, clónica, con abundante utilización de tóxicos, erosiva, devoradora de recursos naturales y altamente dependiente del petróleo", concluyó.

(SERVIMEDIA)
15 Oct 2003
SBA