Según la organización ecologista, la industria química está tratando de sustituir los gases que destruyen la capa de ozono (los clorofluorocarbonos o CFCs) por otros gases (HCFCs o HFCs) que también son "potentes gases de invernadero", como anunció ayer el científico Joe Farman, descubridor del agujero en la capa de ozono sobre la Antártida.

Greenpeace ha hecho llegar tanto a los delegdos españoles en la Convención del Clima de Ginebra como a los principales responsables de las políticas energética y medioambiental españolas varios informes relativos al calentamiento global del planeta.

En los informes se asegura que el aumento sin precedentes de las temperaturas globales medias, "cuyas catastróficas consecuencias ya se están comenzando a registrar", puede y debe ser evitado con una política destinada a reducir drásticamente las emisiones de CO2" y de los demás gases causantes del efecto invernadero".

Esto sólo será posible, a juicio de esta grupo conservacionista, con un progresivo abandono de la quema de combustibles fósiles como forma de obtener energía.

DESPILFARRO ENERGETICO

La alternativa, según los estudios de Greenpeace, se debe basar en el ahorro y la eficiencia energética para poner fin al actual despilfarro de la energía.

A su juicio, "el consumo de electricidad en España puede disminuir hasta la mitad, con lo que sobrarían las centrales nucleares e incluo parte de las que emplean combustibles fósiles. Además, se hace necesaria una transición hacia las energías renovables".

En opinión del presidente de Greenpeace-España, Xavier Pastor, "España debe situarse junto a los países que promueven objetivos de reducción de CO2, y no continuar oponiéndose incluso a la estabilización de las emisiones, posición incomprensible mantenida hasta ahora".

Pastor agregó que España debe solidarizarse con los países cuya existencia se ve amenazada por el "efecto invrnadero", "pues también partes de nuestro territorio, en especial las islas, pueden encontrarse entre las víctimas de la subida del nivel del mar, las sequías o los cambios climáticos".

En la reunión de Ginebra, que se prolongará hasta el día 28, "se corre el peligro", según Greenpeace, "de volver a estancarse en cuestiones formales, como ya ocurrió en la anterior sesión del mes de febrero, en vez de abordar el objetivo global de cómo detener el calentamiento global del planeta".

PRINCIPIOS MINIMOS Para la organización ecologista internacional, la Convención del Clima debería recoger, como mínimo, los siguientes principios:

-Reconocimiento de la atmósfera terrestre como parte integral del medio ambiente, que se debe proteger urgentemente para detener el calentamiento global.

-Principio de precaución: anticiparse y prevenir los daños a la atmósfera.

-Reducción de las emisiones de CO2 de forma inmediata en más del 60 por ciento, comenzando por las naciones industrializadas, entre lasque se encuentra España.

-Creación de un fondo económico que facilite a los países en vías de desarrollo la transferencia de tecnología necesaria para reducir sus emisiones de "gases invernadero".

-Creación de un nuevo organismo independiente, auspiciado por la ONU, que asegure el cumplimiento de los acuerdos internacionales sobre protección del clima.