Greenpeace recuerda que Austria, Francia, Italia y Luxemburgo han prohibido o desautorizado el cultivo del maíz transgénico que está siendo plantado n España. Asimismo, los gobiernos de Grecia, Suiza, Noruega y Ucrania han retirado los permisos para experimentar con diversas plantas transgénicas en sus países.

A juicio del director de Campañas de Greenpeace y representante de la organización que acudirá mañana al Senado, Ricardo Aguilar, "existe un total descontrol sobre los cultivos y experimentos transgénicos en España. Ni siquiera el Gobierno sabe cuántas hectáreas se han plantado y dónde. Además, se siguen vendiendo productos transgénicos sin tiquetar, violando la legislación".

La organización ecologista asegura que son numerosos los estudios que demuestran la peligrosidad de los transgénicos. "Nuevos datos denuncian la peligrosidad de los virus utilizados en la manipulación de estas plantas y las posibilidades de generar nuevas cepas de patógenos", dice la organización.

Por la comisión especial constituida en el Senado para tratar el tema de los transgénicos han pasado ya y pasarán científicos, organizaciones no gubernamentales e insituciones diversas para hablar sobre los riesgos de estos organismos modificados genéticamente.