GREENPEACE DENUNCIA EL VERTIDO AL MEDITERRANEO DE LAS AGUAS RESIDUALES DE BENIDORM (ALICANTE)

MADRID
SERVIMEDIA

La organización ecologista internacional Greenpeace denunció hoy el vertido al mar Mediterráneo de las aguas residuales de Benidorm (Alicante) desde Sierra Helada.

El buque conservacionista "Sirius" ha tomado diversas muestras del efluente, y sustripulantes han colocado en la zona pancartas escritas en inglés y castellano con los lemas: "Alto a los vertidos de aguas residuales al Mediterráneo" y "Benidorm: El Mediterráneo no es un cloaca".

Aunque en esta localidad habitan alrededor de 35.000 personas, durante los meses de verano su población aumenta hasta los 200.000 habitantes, aproximadamente.

Según Greenpeace, la planta de depuración del Rincón de Loix, en el entorno de Sierra Helada, sólo realiza un tratamiento secundario de las agua, "insuficiente para reducir los nutrientes y eliminar las sustancias tóxicas presentes en ellas".

"En verano", agregan, "esta situación se agrava, pues la planta no posee suficiente capacidad para tratar las aguas y una gran proporción de las mismas son vertidas directamente al mar, cayendo en cascada por el acantilado de Sierra Helada, sin ningún tipo de depuración".

Oliva Nunez, portavoz de Greenpeace, señaló que en algunas ocasiones las corrientes arrastran el vertido de vuelta hasta la playade Benidorm.

El aporte excesivo de nutrientes al medio marino provoca su eutrofización, fenómeno que causa un aumento del fitoplancton, originando la aparición de mareas verdes y la regresión de la posidonia oceánica, planta endémica del Mediterráneo.

Greenpeace mantiene que el vertido de aguas residuales desde el macizo de Sierra Helada representa una agresión ecológica y paisajística a un entorno que el Ayuntamiento de Benidorm pretende declarar paraje natural.

Además, ha solicitado la decaración del mar Mediterráneo como "zona sensible", para que todas las aguas residuales reciban un tratamiento terciario.

(SERVIMEDIA)
11 Mayo 1992
GJA