Las autoridades mallorquinas,según Greenpeace, han optado por la recuperación de la materia orgánica de las 150.000 toneladas de residuos que no pueden ser incineradas en la planta de Son Reus.

En opinión de los ecologistas, la fracción orgánica supone al menos el 50 por ciento de la composición de las basuras domésticas. De ahí la importancia de recuperarla para que, después de un proceso de compostaje, se puedan obtener abonos que aportarán nutrientes al suelo.

En España existen desde hace algunos años experiencias de recoida y separación en origen de los diferentes componentes de las bausras domésticas, en las cuales se viene recuperando con éxito la materia orgánica.

"El hecho de que varios ayuntamientos con programas integrales de reciclaje", señala un portavoz de Greenpeace, "alcancen índices de recuperación de la materia orgánica entre el 70 y el 90 por ciento, pone en envidencia la ineficacia de un sistema de compostaje sin una previa separación en origen, que no alcanzaría el 40 por ciento".