GREENPEACE ALERTA SOBRE EL RIESGO DE UN NUEVO ACCIDENTE NUCLEAR EN CHERNOBIL SI LAS AUTORIDADES UCRANIANAS NO CIERRAN LA CENTRAL
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La organización ecologista Greenpeace ha alertado sobre el riesgo de accidente nuclear que existe en la central ucraniana de Chernóbil, donde todavía funcionan dos reactores. Uno de ellos, el número 3, sufrió un nuevo incidente el pasado lunes.
Ocho años después de que el reactor número 4 sufriera un accidente que contaminó, sgún algunas estimaciones, un área de 104.200 kilómetros cuadrados, Greenpeace considera que la situación no sólo no ha mejorado, sino que ha empeorado, "produciéndose un retroceso en los niveles de seguridad nuclear".
Los ecologistas basan su pesimismo en la intención de la industria nuclear rusa y armenia de volver a poner en marcha la central nuclear de Medzamor y de las autoridades ucranianas de reanudar la actividad de la unidad 2 de la central de Chernóbil, que en 1991 sufrió un accidente que tamién provocó su cierre.
Carlos Bravo, portavoz de Greenpeace, manifestó hoy a Servimedia que "a pesar de que seguimos recibiendo noticias sobre la aparición de incidentes en los dos reactores que funcionan en Chernóbil, las autoridades ucranianas insisten en reanudar la actividad de uno que ya sufrió un accidente grave".
Según Carlos Bravo, a esta situación hay que unir los problemas aparecidos en el "sarcófago" levantado alrededor de la unidad 4 tras el grave suceso que protagonizó el 26 de abrilde 1986.
"EL SARCOFAGO SE CAE"
"Las grietas aparecidas en el muro", agregó, "hacen que persista la contaminación radiactiva al exterior y pueden provocar que el sarcófago se vaya abajo".
Expertos nucleares de trece países analizarán entre hoy, jueves, y mañana el futuro de la central ucraniana. Estados Unidos y la Unión Europea ya han pedido su cierre total.
Sin embargo, las autoridades ucranianas supeditan una decisión de este tipo a la creación de mecanismos de ayuda económica por parte e los países occidentales, que amorticen el coste económico que a la república ex soviética le acarrearía esta medida.
Aunque los expertos todavía analizan los efectos del accidente ocurrido en 1986, la Organización Mundial de la Salud mantiene que en algunas zonas cercanas a la central el número de cánceres de tiroides se ha multiplicado por más de 24.
(SERVIMEDIA)
21 Abr 1994
GJA