Granados, que acompañó al número dos del PP por Madrid, Manuel Pizarro, en un acto con jóvenes, hablaba de la importante labor de los inmigrantes en el desarrollo de la región, por ejemplo en sanidad cuando se acordó del doctor Luis Montes, relacionado con las sedaciones de enfermos en el Hospital de Leganés.

El consejero de Presidencia de la Comunidad señaló que en los "ocho nuevos hospitales -de Madrid- no se va a morir nadie sedado en las urgencias, se van a morir en cuidados paliativos".

"A falta de líderes, la izquierda ha convertido en líder al doctor Montes, el de las sedaciones en las urgencias cuando iba alguien con un familiar con un cáncer, quiero creer que siempre terminal", indicó.

Granados añadió que "donde hay que ver si un cáncer es terminal es en oncología, en las salas de cuidados paliativos y siempre con autorización de las familias".

Tras esta crítica, el secretario general de los populares en Madrid señaló que "no quería" entrar en el tema, aunque "ya que estaba"..., y volvió al tema de la inmigración.

"Los inmigrantes nos han dado prosperidad, son parte del crecimiento económico y del desarrollo de Madrid. Queremos que lo sigan haciendo posible, los inmigrantes no son los responsables de la inseguridad de Madrid, el responsable es Zapatero", indicó Granados.

Para el consejero madrileño, Zapatero ataca la "inteligencia" de muchos españoles, a los que cree que puede comprar con 400 euros, y explicó que a "la gente le preocupa la cesta de la compra o el empleo y no los obispos o la alianza de civilizaciones".

"Que se sigan pegando con todo el mundo, nosotros vamos a hablar de empleo, de lo que le preocupa a la gente y lo vamos a hacer sin complejos" porque "nuestras ideas triunfan en todo el mundo".

El dirigente de los populares en Madrid habló también de la Plataforma de Apoyo a Zapatero que presentó ayer un grupo de artistas. "No sé por qué ahora los directores de cine son intelectuales", afirmó Granados, quien añadió que "los problemas no se arreglan con un gesto".

En este sentido, comentó que su gesto es con una mano en alto y con la otra recogiendo las subvenciones del Estado.