En declaraciones a los periodistas en el Congreso de los Diputados, Alborch recalcó que "fue consecuencia, aparte del guión, de la interacción y del compromiso y preocupación de muchos ciudadanos y ciudadanas que en un momento determinado piensan que la resolución d los conflictos nunca es la guerra".

"No hubo ningún tipo de deslealtad", agregó. "Me sorprende que se haya interpretado así. Cuando las personas salen a agradecer los premios, hacen las declaraciones que estiman oportunas".

Además, recordó que la tradición es que en estas intervenciones salgan a relucir "temas que preocupan al mundo del cine", como ocurrió el año pasado, cuando hubo diversas referencias a Argentina que recibieron "cantidad de aplausos".

Insistió en que "la sensibilidad antedeterminados temas está ahí y se manifiesta", y la libertad de expresión justifica que se aprovechen las ocasiones para hacer pública esta preocupación, ya que "el mundo no mejora con la guerra, y eso no quiere decir que se apoye a nadie" ni que se esté "minusvalorando el daño que Sadam Husein está haciendo a su propio país".