González les recordó que esta poca no va a ser fácil, que España está todavía comprometida en varias acciones internacionales que pueden ser peligrosas y, además, hay dificultades presupuestarias.

El presidente recordó con "emoción y gratitud" al almirante Gonzalo Rodríguez y Martín-Granizo, que murió el 16 de diciembre de 1992 cuando ocupaba el puesto de jefe del Estado Mayor de la Defensa. Pidió asimismo a los entrantes el mismo esfuerzo y dedicación que al equipo saliente y les deseó suerte.

Se tratan del teniente general osé Paula García, que accede a la jefatura del Estado Mayor del Ejército de Tierra, en sustitución del también teniente general Ramón Porgueres; el almirante Juan José Romero Canalejo es el nuevo jefe del Estado Mayor de la Armada, que releva al almirante Carlos Vila, y en el Ejército del Aire el teniente general Ignacio Manuel Quintana Arévalo reemplaza al teniente general Ramón Fernández Sequeiros.

Además de Felipe González, asistieron a la toma de posesión el vicepresidente, Narcís Serra; el ministo de Defensa, Julián García Vargas; el ministro de la Presidencia, Alfredo Pérez Rubalcaba, y el actual ministro de Educación, Gustavo Suárez Pertierra.

También el jefe de los servicios de inteligencia militar (Cesid), Emilio Alonso Manglano, y todos los secretarios y directores generales del Ministerio de Defensa.

Tras la jura del cargo, el presidente del Gobierno agredeció a los mandos salientes su esfuerzo y dedicación, sobre todo en una época difícil, en la que, recordó, se ha producido la gurra del Golfo y la intervención de los cascos azules españoles en Bosnia.