"Ahora mismo", dijo Anguita a diversas emisoras, "no hay ningún país de la Unión Europea que esté dando el espectáculo más bochornoso que estamos dando nosotros. Desde don Manuel de la Concha, don Mariano Rubio, don Luis Roldán, el señor Romaní, Mario Conde, Javier de la Rosa en la cárcel; nada menos que un director general de la seguridad del estado en la cárcel; una acusación a otros funcionarios de terrorismo de Estado, es decir, sangre por medio".

De reacción "exemporánea y disparatada" calificó estas declaraciones de Anguita el secretario de Organización del PSOE, Cipriá Císcar.

Ciscar afirmó que "resulta cada vez más evidente que la única razón política que, en estos momentos, mueve al señor Anguita es la desprestigiar a toda costa la imagen de Felipe González y su Gobierno". "La obsesión del señor Anguita", añadió el dirigente socialista, "ha llegado en este punto a tal nivel de paroxismo que raya en el absurdo".

El secretario de Organización manifest que "cuando no hay argumentos rigurosos, ni alternativas serias que ofrecer, el recurso más fácil es acudir al catastrofismo y al insulto personal, a lo que lamentablemente el señor Anguita empieza a acostumbrarnos a todos".