GONZALEZ ADVIERTE A EMPRESARIOS Y SINDICATOS QUE EL MERCADO LABORAL SE REFORMRA AUN SIN SU CONCURSO

MADRID
SERVIMEDIA

El presidente del Gobierno, Felipe González, pidió hoy un esfuerzo de diálogo a los agentes sociales para llegar a un acuerdo sobre la reforma del mercado laboral, pero les advirtió que el Ejecutivo llevará adelante la reforma aunque no cuente con su respaldo.

Durante la clausura de unas jornadas sobre unión europea celebradas en El Escorial (Madrid), González evaluó como "poco comprensible" la respuesta "condicionada por la coyuntura política que, a su juicio, han dado los agentes sociales a la propuesta de reforma del mercado laboral lanzada días atrás por el Ejecutivo.

"Me cuesta trabajo aceptar esta respuesta", remarcó González, quien sin embargo insistió en que su Gabinete hará un esfuerzo de diálogo para que la reforma sea consensuada. A renglón seguido, advirtió: "Si no se llega a un acuerdo, asumiré el compromiso de decirle a los ciudadanos que hay que reformar el mercado laboral".

Bajo la hipótesis de que no se logre el conseso, González dijo que la reforma se podrá sacar adelante "en unos aspectos" y "en otros será más difícil".

Como argumento favorable a la reforma del mercado de trabajo, González habló de la existencia en estos momentos de "excesos de contratación", "rigideces en las salidas" y "flexibilidad excesiva en las entradas" de los trabajadores al escenario laboral. "Pero hay que hablar de una revisión global del mercado de trabajo, no sólo una revisión generalizada", apostilló.

A los que denuncian la prearia situación de los jóvenes con contrataos temporales, el presidente del Gobierno les objetó que durante los últimos meses la principal destrucción de empleo ha venido de los despidos de personas mayores con contratos fijos, y no tanto de los jóvenes recién incorporados al mercado.

González hizo esta reflexión sobre la reforma del mercado laboral y la postura al respecto del Gobierno al hilo de un análisis sobre la evolución de la construcción comunitaria.

El jefe de Ejecutivo dijo que los intelocutores sociales deben estar comprometidos" con el desafío de la competitividad y, en el contexto inmediato de la economía española, "sentarse a dialogar sobre las reformas estructurales y la política de rentas". "Es imposible esperar de este Gobierno que asuma la responsabilidad que corresponde a todas las partes", dijo.

González aseguró que el Gobierno no reducirá el déficit dos puntos sobre el PIB "sólo para dar una sensación de que se alegra la economía ante una perspectiva electoral".

Parael presidente, los objetivos "número uno" de la econmía española son crear competitividad y crear empleo. "No encuentro incompatibilidad entre ambos", añadió.

González reconoció que sus palabras sobre el esfuerzo necesario para consensuar la reforma del mercado laboral pueden sonar a prédica, pero alegó que también existen en este país "muchos predicadores que sólo se suben al púlpito para denunciar lo mal que lo hacen los otros y decir lo bien que lo harían ellos".

(SERVIMEDIA)
04 Feb 1993
JRN