"Será un Gobierno inestable, que tendrá que hacer virguerías para que la sociedad no nacionalista, que es una parte importante, no se sienta desplazada, y tiene tintes de incrementar el contencioso con el Gobierno central", advirtió Mosquera en declaraciones a Servimedia. A su jucio, estas son las conclusiones que se desprenden del discurso de investidura del lehendakari peneuvista, Juan José Ibarretxe, sin el que, en su opinión, no hubiera obtenido el apoyo de Eusko Alkartasuna (EA) y Euskal Herritarrok (EH).

"Puede ser un Gobierno que tranquilice a ETA en cuanto a las perspectivas de pacificación, pero desde el punto de vista de las instituciones del Estado de derecho es preocupante, porque provocará una fractura en muchos aspectos y ahondará en las diferencias dntro del País Vasco", agregó.

Por último, el diputado de Unidad Alvesa hizo un llamamiento a la unidad de los partidos no nacionalistas, a los que instó a "perder el complejo de frentismo que adquirimos cuando los nacionalistas nos acusan de crear un frente nacional. Mientras el nacionalismo lo tiene claro y escenifica acuerdos, como el Pacto de Barcelona, nosotros estamos divididos, dispersos, peleándonos y sin ofrecer alternativas", insistió.