González explicó que el Consejo de Gobierno autorizó hoy la tramitación anticipada del gasto con el que se pagará la RMI a fin de garantizar, desde el mismo 1 de enero de 2007, la protección económica para hacer frente a las necesidades básicas de la vida de las personas beneficiarias de esta prestación.

Los perceptores de la RMI, además de tener derecho a una prestación económica periódica en función de los miembros que conforman la unidad de convivencia y de los recursos económicos de que dispone, pueden acceder a apoyos personalizados para la inserción laboral y a otras ayudas como las de comedor y becas de libros si en la familia hay niños en edad escolar.

El reconocimiento del derecho a la prestación de Renta Mínima ofrece también a estas personas la posibilidad de participar en proyectos de integración, cuyas actividades se dirigen a la promoción social de personas en situación o riesgo de exclusión.

En este sentido, la Consejería de Familia y Asuntos Sociales destinará 6,7 millones de euros para desarrollar durante 2006 y 2007 un total de 78 proyectos de este tipo.