Saavedra se mostró partidario de acelerar el proceso de traspaso de competencias de las comunidades autónomas a los ayuntamientos.

El ministro, que inauguró en Sevilla un encuentro sobre los problemas actuales de las corporaciones locales, consideró que en estos momentos la deuda local "no es especialmente alarmante con independencia de alguna situación concreta".

Según sus datos, la deuda municipal ha pasado de 1,4 billones de pesetas en el 1991 a 2,3 en 1993: un billón con la banca pública, 358.000 millones de pesetas con los bancos privados, 627.000 con las cajas de ahorros, 91.000 de emisiones de deuda y 108.000 en créditos en moneda extranjera. De este total, la deuda a corto plazo representa un 16% (380.000 millones).

A juicio de Saavedra, la deuda realmente problemática para los entes locales asciend "únicamente" a 180.000 millones de pesetas, que se concentra en algo más de 350 corporaciones que representan el 5% del total nacional. El esfuerzo de refinanciación supone un equivalente a 100.000 millones de pesetas.

Al respecto, se mostró partidario de estudiar con detenimiento las reformas legislativas a introducir en las figuras impositivas que afectan a la financiación local, concretamente el impuesto de bienes inmuebles y de actividades económicas.

Saavedra apostó por acelerar el proceso e traspaso de competencias de las comunidades autónomas a los municipios. "Es preciso concienciar a las comunidades autónomas de la necesidad de crear en unos casos y potenciar en otros los fondos de participación de las corporaciones locales en sus ingresos, de acuerdo con lo previsto por la Constitución, para que, preferentemente, contribuyan a activar la econocmía y generar empleo en los municipios", afirmó.

El titular de Administraciones Públicas recordó que de las 15 comunidades autónomas de régien común de financiación, sólo 8 tienen constituído fondos de estas características, "pero con cantidades casi simbólicas en función del número de municipios en cada comunidad".

Saavedra anunció que la próxima semana el Gobierno iniciará una segunda ronda con las fuerzas políticas para alcanzar el acuerdo sobre el pacto municipal.

El Ejecutivo confía en la disponibilidad del Parlamento para lograr un concenso en esta materia, aunque preve dificultades para concensuar medidas que permita la transprencia municipal y eviten el transfugismo en los ayuntamientos.