Con la aplicación de esta directiva se pretende, según esta publicación, mejorar la seguridad vial del conductor y el pasajero y, además, "resolver el vacío formativo" existente en el sector, entre otras cuestiones.

Según declaraciones del secretario general de la Confederación Española de Formación del Transporte y la Logística, Francisco Gestoso, recogidas por esta revista, "para ser conductor profesional sólo hace falta un carné de conducir. No está ligado a las competencias que un transportista requiere".

"Los profesionales lo son sólo porque han acumulado mucha experiencia, pero no está definido el perfil profesional del conductor. Sin embargo, con la nueva normativa se abre la puerta a la reivindicación de un plan de formación para los conductores mediante la creación de un organismo sectorial y la puesta en marcha de cursos homologados", añade.

Otros aspectos que se verán mejorados con su entrada en vigor, según "Autobuses y Autocares", serían la reducción de la siniestralidad en el sector y la facilidad que tendrán nuevos trabajadores para incorporarse a este tipo de empleos.

Por otra parte, el subdirector general de Ordenación y Normativa del Ministerio de Fomento, Emilio Sidera, cuya opinión también recoge esta publicación, apunta la necesidad de aportar "cualificación inicial a personas que aún no se han incorporado al sector" y de aplicar "una formación continua para los que ya se encuentran en activo".

En cuanto al modo por el que se llevará a cabo la transposición de esta directiva, "Autobuses y Autocares" señala que, "en un principio", se pretende establecer mediante norma con rango de real decreto.