La senadora de Izquierda Unida Isabel López Aulestia se sintió decepcionada con esta contestación que le dio el ministro en la sesión de control al Gobierno, ya que ella esperaba que dijera que "en ningún caso autorizaría la renovación" del permiso, cuya validez expira en 2009.

López Aulestia defendió la necesidad de cerrar la central nuclear porque "está vieja" y "supone un peligro para la población" de los alrededores.

Montilla afirmó que será en 2006, tres años antes de la expiración de la concesión, cuando la empresa explotadora de la central deberá solicitar su prórroga. En caso de que lo haga, y tras un informe del Consejo de Seguridad Nuclear, "el Gobierno se pronunciaría" al respecto a partir de ese momento.

Tras asegurar que Santa María de Garoña, como todas las centrales nucleares de España, cumple todas las medidas de seguridad con criterios internacionales, el ministro recordó que el Gobierno tiene el compromiso de ir sustituyendo "de forma gradual y segura" las centrales nucleares por otros tipos de fuentes energéticas.