Así lo confirmaron a Servimedia fuentes cercanas al Ejecutivo, que explicaron, además, que esta iniciativa cuenta con el respaldo de la mayoría de los grupos parlamentarios, del sector eléctrico, de los consumidores, de los sindicatos e, incluso, de algún grupo ecologista.

Eso sí, esta ampliación de la edad de vida de las centrales nucleares españolas (que excluirá Zorita -Guadalajara- y Santa María de Garoña -Burgos-) iría ligada a una "fuerte" inversión en innovación tecnológica y seguridad para garantizar su correcto uso, si bien se trata de centrales relativamente jóvenes y con elevados controles.

Las mismas fuentes confirmaron que esta intención no choca con la pretensión comprometida por el PSOE en su programa electoral de sustituir progresivamente la generación nuclear de energía por otro tipo de fuentes energéticas. Entienden que la necesidad de garantizar una generación eléctrica que no ponga en riesgo el sistema y, por extensión, el crecimiento de la economía española, obliga a mantener las nucleares.

LIBRO BLANCO

Esta recomendación de mantener y garantizar la potencia nuclear instalada al menos durante 20 años más se incluirá en el Libro Blanco del Sector Eléctrico, que será presentado a finales de mes y que cuenta con las aportaciones de todos los sectores afectados, aunque no es vinculante.

El libro blanco recoge las aportaciones de todos los sectores y contará con el apoyo de los sindicatos, entre otros colectivos, a la medida de garantizar la generación eléctrica procedente de las nucleares.

La secretaria de la Federación de Industrias y Afines de UGT, Francisca Sánchez, explicó a Servimedia que ellos son partidarios de una ampliación de la vida útil de las centrales, con un límite de 30 años, y pidió un "debate serio y riguroso" sobre la energía nuclear.

Por su parte, el secretario de Economía del PP, Miguel Arias Cañete, explicó a Servimedia que la elevada demanda de electricidad y el control de emisiones de CO2 que impone el Protocolo de Kioto obligan al Gobierno a contar con la energía nuclear. El PP propone, incluso, poner en marcha nuevas centrales.

DEBATE SERENO

Por otra parte, de cara al futuro, la apuesta de los expertos -con la que está de acuerdo el área económica del Gobierno- para mantener la generación eléctrica pasa por un "mix" que se apoya en la energía nuclear, un incremento del uso del carbón (cuidando las emisiones), mayor utilización de energías renovables y apuesta por los ciclos combinados, si bien la carestía del gas provoca cierto recelo en este sentido.

Esta apuesta por el futuro del sector eléctrico se apoya también en el Plan de Eficiencia Energética que el Gobierno tiene previsto aprobar hoy en Consejo de Ministros.

Además, el Ministerio de Industria apoyará sus tesis con una Mesa para el Diálogo sobre la evolución de la energía nuclear, en la que se trata de realizar un "debate político sereno" para analizar la situación y las posibilidades "reales" de sustituir la potencia nuclear instalada por otra procedente de otras tecnologías.