Así lo aseguró a la prensa tras participar en el minuto de silencio en Valladolid por la última víctima de violencia machista en España, en la Delegación del Gobierno de Castilla y León. Se trata del asesinato de una mujer de 48 años el pasado 12 de agosto, que ha elevado la cifra de mujeres asesinadas por violencia de género en España a 29 en 2024 y a 1.273 desde 2003, cuando comenzaron las estadísticas.

Yáñez, expareja del presidente argentino Alberto Fernández, ha declarado recientemente a la Justicia haber sido víctima de violencia de género y abuso de poder y que incluso Fernández la obligó a abortar, algo que la propia víctima califica de violencia reproductiva. Por ello, la ministra española añadió en Valladolid que “las violencias machistas no conocen ni de clases sociales ni de actividades profesionales, ni prácticamente de ninguna diferencia social".

SIN LIBERTAD

“Estamos hablando de las violencias machistas de siempre. Son siempre lo mismo: la dominación del hombre sobre la mujer y un intento de controlar absolutamente su vida, de no dejarlas en libertad”, prosiguió la responsable española de las políticas de igualdad.

Redondo reflexionó que “un caso de estas características” tiene “un impacto a nivel mundial importante”, lo que conciencia “más” a la sociedad “de los problemas que supone para muchas mujeres convivir con un violento machista”. Esa convivencia supone, continuó la ministra, estar “con una persona que va a dominar tu vida en todos los aspectos, desde cuando tengas hijos, hasta qué haces un sábado por la tarde”.