EL GOBIERNO ELUDE POLEMIZAR CON GUERRA Y CONFÍA EN QUE SALGA "UN MEJOR ESTATUTO" CATALÁN DEL ACTUAL DEBATE
- El es dirigente socialista augura "pocas posibilidades" de que las Cortes dejen pasar incluir la financiación en el estatuto porque vulneraría la soberanía nacional
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El Gobierno eludió esta tarde polemizar con el presidente de la Comisión Constitucional del Congreso, Alfonso Guerra, quien ha asegurado en los cursos de verano de El Escorial que incluir la financiación en el futuro estatuto de Cataluña fragmenta la soberanía española y por tanto la reforma tiene "pocas posibilidades" de prosperar".
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, la vicepresidenta primera, María Teresa fernández de la Vega, afirmó que declaraciones como las de Guerra, hechas horas antes en el ámbito de la Universidad, "hay que respetarlas".
"No se van a comentar. Ya saben que la posición del Gobierno en el orden de un estatuto que está en estos momentos en el ámbito del Parlamento Catalán, es de absoluto respeto", añadió la vicepresidenta que, en otro momento de su comparecencia expresó su convicción de que saldrá "un mejor estatuto" del actual debate.
Fuentes del Ejecutivo valoran positivamente que la ponencia parlamentaria redactora del Estatuto catalán haya aprobado, esta mañana, la proposición de ley de reforma estatutaria aunque sea sólo con los votos del tripartito (PSC, ERC e Iniciativa).
Si CiU repite la abstención de hoy (el PP ha votado en contra) en la votación en comisión del Parlament, el 29 de julio, el texto sería rechazado, por lo que es previsible una negociación del tripartito con los convergentes en las dos semanas que restan. Estos quieren meter enmiendas sobre financiación y "blindaje" de las competencias de la Generalitat.
Por su parte, el PP ha votado en contra al interpretar que el texto de 218 artículos incluye elementos inconstitucionales, en la líonea de lo expresado por Guerra, quien juzga imposible que las Cortes den el visto bueno a lo aprobado hoy "a menos que se quiera la desaparición del Estado".
Desde el Ejecutivo se admite que todavía hoy las espadas están en alto, pero se advierte también que nadie, incluso CiU y el PP, que se han abstenido y han votado en contra, quiere romper la baraja y quedar fuera de la reforma del Estatut.
En cuanto a las palabras del que fuera vicepresidente del Gobierno socialista, Alfonso Guerra (1982-1990), una fuente del Ejecutivo socialista actual recordaba esta tarde que Guerra era partidario en su día de suprimir las universidades de verano porque, a menudo, se vertían en ella declaraciones inconvenientes.
(SERVIMEDIA)
01 Jul 2005
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