El diputado popular Arsenio Fernández de Mesa presentó una batería de preguntas cuestionando al Ejecutivo sobre la situación y el cometido que realizan los militares españoles en las distintas misiones internacionales en las que se participa.

En lo que a Kosovo se refiere, el Gobierno señala que "el contingente militar español desarrolla su trabajo en Kosovo con las medidas de seguridad adecuadas, adaptadas a la misión y al entorno", según manifiesta en una respuesta parlamentaria.

En Afganistán, el Ejecutivo dice que el contingente español se encarga de "proporcionar un entorno seguro que permita la reconstrucción y gobernabilidad del país y el acceso a la ayuda humanitaria a todos sus ciudadanos, apoyando para ello al Gobierno de Afganistán en la consolidación y extensión de su soberanía a todo el país".

De la operación en Líbano, la más reciente iniciada por España, el Ejecutivo se ciñe a la Resolución 70 (2006) del Consejo de Seguridad de la ONU en la que dice que la misión en el Líbano (UNIFIL) consiste "fundamentalmente en prestar asistencia al Gobierno de Líbano para que pueda ejercer su soberanía en todo el país, previniendo una vuelta a las hostilidades y creando condiciones para lograr una paz duradera".

"Para conseguir estos objetivos, sigue la respuesta parlamentaria, el contingente español realiza, entre otras, labores de patrullas, ocupación de puestos de observación, operaciones de apoyo a las Fuerzas Armadas Libanesas, desminado y desactivación de explosivos, ayuda para la reconstrucción y proyectos de impacto rápido.

De la misión en Bosnia, el Gobierno señala que el trabajo de los militares del Batallón Multinacional que lidera España "consiste en estar preparados para conducir operaciones en apoyo de las autoridades de ese país, de la Unión Europea y de la Comunidad Internacional, con la finalidad de mantener o restaurar un ambiente de seguridad y estabilidad".

Por último, en lo que a las misiones de observadores se refiere, el Gobierno señala que éstos trabajan en Sudán "con las mejores condiciones" mientras que en Etiopía y Eritrea lo hacen con una seguridad "aceptable".