El arco mediterráneo español se ve sometido a una situación de sequía que, si bien se ha visto atenuada con las lluvias de los últimos días, puede derivar en una situación de emergencia por escasez coyuntural en verano por el aumento de las demandas en el litoral levantino.

Por ello, el Gobierno considera necesarias algunas actuaciones urgentes que contribuyan a paliar la escasez y a robustecer, transitoriamente, la garantía de suministro del agua.

De hecho, el Gobierno y la Generalitat de Cataluña acordaron a comienzos del pasado febrero, ante la situación de sequía en el territorio catalán, la posibilidad de llevar hasta 40.000 hectómetros cúbicos de agua en barco a partir de junio desde la desaladora de Sagunto hasta Barcelona para abastecer a los ciudadanos de la capital catalana y su área metropolitana.

Esa posibilidad ha quedado descartada por el Ejecutivo catalán, toda vez que las últimas lluvias han elevado la reserva de los embalses en las cuencas interiores de Cataluña.

ABASTECER AL ARCO MEDITERRÁNEO

Por otro lado, Transición Ecológica aboga por el suministro desde la desalinizadora de Sagunto como medida para apoyar la garantía de demanda de agua en distintos puntos del eje mediterráneo.

Este se realizaría por barco, desde el puerto de Sagunto, limítrofe con la desaladora, hasta los distintos puertos del litoral español donde pudieran surgir necesidades de abastecimiento a lo largo del verano, como Barcelona, Mallorca, Málaga o Cartagena.

Para enviar agua desde la desalinizadora de Sagunto, aprovechando al máximo la capacidad de producción de la planta, se necesita complementar las conducciones de distribución con una nueva tubería que permita transportar un mayor caudal. La longitud estimada es de 3,2 kilómetros.

Tras una valoración aproximada de los trabajos necesarios para acometer las obras de emergencia, Transición Ecológica calcula una inversión de 3,5 millones.