Todos ellos alegan y han demostrado como circunstancias excepcionales su vinculación con España, conservando profundos lazos emocionales, históricos y afectivos, además del consiguiente reflejo cultural en sus costumbres.

La nacionalidad española se adquiere por carta de naturaleza, otorgada discrecionalmente por real decreto cuando en el interesado concurran circunstancias excepcionales y después de tramitar un expediente para cada caso particular.