El crédito tendrá una amortización de 20 años, que incluye diez de gracia, y a un interés anual del 4,10 por ciento. Las autoridades de Medellín y los constructores se vieron obligados a interrumpir las obras en noviembre de 1989 por problemas en la entrega de equipos y en la compra de terrenos.

El pasado 13 de febrero se acordó la reanudación de los trabajos,después de prolongadas gestiones, en las que llegaron a participar Felipe González y el presidente de Colombia, César Gaviria.

Durante una reunión que mantuvieron ambos mandatarios el pasado 17 de enero, González ofreció financiar cerca de 33.000 millones de pesetas, la cantidad aproximada que restaba de invertir para el fin del proyecto, siempre que el consorcio de empresas hispano- alemán y la Empresa de Transportes Masivo del Valle del Aburrá (ETMVA) llegaran a un acuerdo.

De esos 330.000 millnes, 30.000 iban destinados a créditos comerciales y los 3.000 restantes se canalizarían a través del Fondo de Ayuda al Desarrollo.