Carrasco, que se reunió hoy en Toledo con el director del Icona, Humberto Da Cruz, adelantó que la intención del Gobierno de Castilla-La Mancha es extender la zona de protección de las Tablas de Daimiel al resto de lagunas, para conformar "lo que algún día puede llamarse 'Parque Nacional de las Tablas de Daimiel y de las Zonas Humedas de La Mancha'".

El consejero dijo que "las medidastomar a corto plazo, para solucionar el estado crítico de las Tablas, son las derivaciones de agua desde las lagunas del acuifero 23 o desde el trasvase del alto Tajo".

Sin embargo, Carrasco se mostró convencido de que, a largo plazo, la solución pasa "por la implantación de cultivos de regadío extensivo de una sola cosecha anual, además del ahorro de agua contemplado en el Plan de Recuperación de los Humedales manchegos, puesto en marcha este año por el Gobierno regional, tanto para el acuifero 23 cmo para el 24".

El responsable de Agricultura castellano-manchego anticipó que antes de abril del 94 el Gobierno instalará caudalímetros en cada parcela de riego del acuifero 23, a través de la colaboración del Ministerio de Obras Públicas, Transportes y Medio Ambiente, "para que pague más el que más gaste".

Por su parte, el director general del Icona calificó de "muy satisfactorio" el proyecto del Gobierno regional de integrar las lagunas en el Parque Nacional de las Tablas de Daimiel, al considrar que "sólo con una actuación en el conjunto de esa zona húmeda se podrá salvar este parque nacional".