Cada vez que llegue el tren a cada una de las ciudades, los promotores acudirán a los centros comerciales de la ciudad y a los medios de comunicación para presentar diferentes ofertas de viajes a las islas y los atractivos que éstas ofrecen. La iniciativa pretende reactivr el turismo peninsular que visita Canarias y evitar futuros descensos de afluencia.

La campaña tiene un coste de 300 millones de pesetas, de los que 90 corresponden al alquiler a Renfe del tren llamado "Paraíso", que comenzará a recorrer tierras peninsulares tan pronto termine la Feria Internacional de Turismo (Fitur), en enero.

Lorenzo Olarte ha mostrado en los últimos meses su preocupación por un paulatino descenso del turismo peninsular que visita las islas. Si en 1993 el 20 por ciento del tuismo que llegaba a Canarias era peninsular, en 1995 el porcentaje no llegaba al 17 por ciento y las previsiones apuntan a que en el futuro esos turistas elijan otros destinos con los mismos precios de Canarias en Oriente Medio y países del Este de Europa.