Aun en el caso de que la cuantía aprobada definitivamente sea de 35.000 pesetas, será inferior a la prevista en un principio: un 75 por ciento del salario mínimo interprofesional, que en la actualidad es de 56.286 pesetas.

Esta rebaja fue justificada por el consejerode Sanidad y Asuntos Sociales, Julio Pérez, afirmando que es una medida destinada a evitar una falta de incentivo para buscar trabajo y que los beneficiarios "se acostumbren a vivir siempre en situaciones de marginación".

Según el Gobierno canario, en el archipiélago hay unas 30.000 familias pobres de solemnidad, ya que cada uno de sus miembros ingresa menos de 15.000 pesetas por mes. Otras 69.000 familias sufren pobreza moderada, con una renta máxima de 29 pesetas.

El Ejecutivo regional destina n la actualidad 400 millones de pesetas para paliar estas situaciones, cantidad insuficiente para cubrir la demanda existente. Más de 16.000 canarios esperan que se resuelva su solicitud.

Julio Pérez considera que las medidas para sacar a estas personas de su situación de marginación pasan por acciones de integración social, para romper la marginalidad y la pobreza en las que viven.