Para ello, el Gobierno de Cristófol Soler, del PP, derogará uno de los apartados de la orden sobre el uso de la lengua catalana en las islas, aprobada en agosto de 1994, en el que se permitía que los centros escolares pudiesen enseñar íntegamente en castellano.

Esta medida está enmarcada en la nueva política lingüística de impulso al uso del catalán, promovida en las islas desde que Soler accedió a la presidencia del Gobierno autonómico, en sustitución del también popular Gabriel Cañellas.

Según el primer análisis realizado por la Consejería de Cultura sobre la implantación de la lengua catalana en la enseñanza, un 30% de los colegios públicos de Baleares enseñan íntegramente en castellano, a excepción de la propia asignatura de legua catalana. Esta cifra se eleva hasta el 60% en la enseñanza privada.

El estudio, correspondiente al curso 95-96, refleja cuáles son los centros escolares que tienen elaborado un 'proyecto lingüístico', obligatorio según la normativa autonómica y que consiste en la fijación de plazos temporales de utilización del catalán en la enseñanza.

Más de un 20% de los centros, tanto públicos como privados, incumplen esa prescripción, por lo que el Gobierno balear ha anunciado que llevará a cabo las accioes necesarias para que se garantice su cumplimiento.

El análisis demuestra el avance en la implantación del catalán. Mientras en el curso 94-95 había un 50% de centros públicos con enseñanza en catalán, en el 95-96 se ha pasado a un 70%. En los centros privados, el porcentaje subió del 16 al 40%.

Por alumnos, 39.214 reciben alguna materia en catalán este curso, por encima de los 28.100 que lo hicieron el curso pasado. La cifra en la enseñanza privada pasó de 7.207 alumnos en el curso 94-95 a 17.35 en el curso 95-96.